20.4.10

Escribir ayuda, háganme caso...

A las once de la noche y teniendo que levantarme mañana a las 6 a.m me han vuelto las ganas de escribir que tenía tan olvidadas en un cajón. Precisamente en un cuaderno en el que dejé por escrito todo lo que necesitaba no decir pero sí soltar.


Hay malas épocas en la vida. Es algo incuestionable. Un psicólogo en un programa de televisión dijo que sólo se podían pasar dos hechos trágicos en la vida porque pasado ese límite la mente podía colapsarse. No puedo opinar porque lo cierto es que no se muy bien a qué se puede llamar "gran tragedia". Entiendo que perder un hijo lo es, que vivir un terremoto lo es.... pero hay muchas cosas en la vida de una persona corriente que no pasa por una catástrofe así que siente mucho dolor. ¿Pero es ese dolor por cosas ocurridas "una gran tragedia"? Yo no sabría contestarlo. Las depresiones causan dolor y a veces ni los afectados saber el porqué empezó. ¿Podría ser una gran tragedia?


Alguien me dijo una vez que los seres humanos no estamos acostumbrados a pasarlo mal y a sentir dolor. Vivimos en un mundo de ilusión en el que cuando viene algo negativo nos trastornamos. Esa persona dijo que es necesario un periodo de duelo en el que pasarlo mal, llorar, enrrabietarse y sufrir. Después de eso hay que dejarlo atrás e ir saliendo del agujero. Lo vi muy sensato y tiene su lógica.


En mi caso, cuando he tenido periodos de duelo como decía esta persona me ayudó escribir. Nunca he conseguido en mi vida una continuidad en esto. Conozco a una persona que tiene la fuerza de voluntad de pararse y escribir el transcurso de los acontecimientos que pasan por su vida y así lleva años. Es mi heroína porque yo nunca lo he conseguido. Sin embargo, ciertas épocas me han abierto la necesidad de tener que escribir lo que no me salía poder contar y en algo ha tenido que funcionar porque una vez comencé con esa tarea me dispuse a explicar a quien yo quería explicar lo que estaba pasando.


Por lo tanto, mi recomendación de hoy no es más que esa. Quizá sea por pensar que un día podrás leerlo y volver a lo caliente de la situación cuando tú ya estás bien fría. Hay que recordar que las cosas se olvidan y se ven desde otro prisma. Lo que hoy nos cabrea dentro de unos meses no será cabreo, será recuerdo de un enfado y ya no será lo mismo. Es posible que un día, cuando vuelva a encontrarme con esas hojas que hasta dentro de mucho tiempo no volveré a leer pueda entenderme y valorar un cambio a lo largo de la vida. O quizá no, pero no lo sabré hasta entonces.

2 comentarios:

Yoli dijo...

Llevaba meses sin abrir tu blog, y hoy cuando me he dado cuenta he pensado ¿cómo no me acordado de leer el blog de saray??? tan ocupada estuve??? Se me quitó de páginas habituales y....
Lo abrí y vi que tu tampoco habías estado durante éste tiempo escribiendo ¡¡¡¡qué casualidad!!!! Entro justo el día después......
¿¿será el destino?? la casualidad??? quien sabe.........

Sigue escribiendo, que yo soy una de esas heroínas!!!!!
Un beso wapa

Unknown dijo...

Tenía tu blog en favoritos aunque no recuerdo muy bien cuándo lo puse ahí. Lo cierto es que al leer tu última entrada me he encontrado con la misma idea que me llevó a mí a escribir un blog... Otra casualidad.