25.2.09

Nací vaga...

Me cuesta lo mío admitirlo, pero después de lo de hoy he de ser sincera con el mundo. Soy muy vaga. Se me ha olvidado lo que era el non-stop y claro, se nota. Uno se acostumbra rápido a la buena vida, y que me lo digan a mí! Sin encontrar un trabajillo por el momento que me reporte el pagarme la vida de ocio que llevo, con tan solo una asignatura que hacer, con las obligaciones justas en casa...ME ABURRO! Nunca habría pensado que saldría de mi boca semejante frase, pero es cierto. Las horas pasan en mis días como si nada y es que me tiro la mayor parte del día durmiendo!! ¿Será que estoy intentado recompensarme por las horas de sueño perdidas en la radio y en Bruselas?

Es cierto que me aburro, pero...he de confesar otra cosa...soy tan vaga que no le pongo remedio. Hace como una semana me enteré que había que entregar un trabajo para la asignatura que tengo cursada en mi querida Carlos, la única que tengo! Pues bien, teniendo una semana por delante...¿qué ha hecho la Señorita? ¿Ha ido preparándolo con tiempo, interesándose en profundizar en la materia ya que tenía tantísimo tiempo?¿Ha ido siquiera leyendo el artículo del que había que presentar un ensayo?¿Ha buscado incluso el texto para saber cuan largo era o cuan dificultosa podía ser la tarea?...Que va! La Señorita se ha pasado la semana durmiendo y descansando, saliendo, leyendo y viendo la tele!! Qué vergüenza! Hasta a mí me la da reconocerlo... Efectivamente, no he ni siquiera buscado el texto hasta ayer (mañana es la entrega del ensayo). Pero es que además, como voy de sobradísima por la vida, ayer vi el texto en inglés y me dije a mí misma: "en inglés...buaaaaa...anda que no habré hecho yo resúmenes de textos en inglés....cada semana uno en Bruselas! Esto es pan comido....pues nada...entonces lo dejo y ya mañana me pongo con ello..."

Sorpresa la mía cuando hoy (y después de comer, que no quería yo saturarme por la mañana) he empezado a leer el artículo. Pasadas la primera hora ha comenzado la realidad a darse de bruces contra mi cara. Primero, el texto no era tan fácil como yo pensaba en inglés; segundo, yo no iba tan rápido leyendo en inglés como creía; tercero, como es posible que me sorprenda cada nuevo día de lo aburrido que es leer textos económicos??; cuarto, "uuuyyyyy, qué de cosas interesantes sobre mi mesa!"; quinto, precisamente hoy ha sido el día elegido por mi hermana para subir a mi habitación a contarme todos sus problemas en busca de respuesta y atención; sexto, "mmm...necesito algo dulce, necesito algo dulce, necesito algo dulce"...y así ha pasado la tarde y la noche hasta hace unas horas que he acabado el puñetero y odioso ensayo.
He sido vaga hasta decir basta y encima tengo el morro de cancelar una quedada hoy por si no me daba tiempo. ¿Cómo me va a dar tiempo si vivo en las musarañas?
No diré que cambiaré. Sería una mentira de las gordas. Esta vez no haré un buen propósito para el próximo ensayo porque sé lo que ocurrirá y no me gusta defraudarme a mí misma. Prefiero que me vuelva a pillar el toro que es más emocionante.jej.

22.2.09

Estar fuera para dejar de ser inocentes...

Creo que alguna vez he cometido el error de creer ser inocente cuando lo que en verdad pasa es que no quería ver, no quería desilusionarme.
Cuando conoces a gente nueva, y del sexo contrario en este caso, no sabemos qué intenciones e intereses tienen por dedicarte tiempo. A menudo he optado por pensar siempre con los ojos cerrados sobre este tema debido a mi lucha por el lema de que un chico y una chica pueden ser realmente amigos sin un trasfondo detrás. Un lema que seguiré defendiendo siempre. Sin embargo, a veces te hace falta estar viendo una situación desde fuera para comprender que ese lema no lo puedo aplicar en todos los casos.
Cuando estos días he podido ver desde fuera una situación similar: chico con novia conoce a chica y defiende sus más amigables intereses a pesar de que todo indica lo contrario, me he dado cuenta de que hay que afrontar ciertas verdades casi absolutas en el tema de relaciones. Parece que el "piensa mal y acertarás" se cumple salvo agradables excepciones.
El chico, como yo en la mayoría de ocasiones, defendía la postura de "sólo quiere que seamos amigos" cegado por el "pensar bien" sobre los demás. Sin embargo, con el tiempo, los embistes de la chica son cada vez mayores y él puede que vaya cayendo en su error.
Es algo normal, me animo a pensar. La manera en que se conoce la gente dice bastante de los intereses en los que puede estar pensando otra persona. Porque..seamos honestos...entablar una "amistad" en un mundo virtual como Facebook o Tuenti no parece el lugar idóneo para hacer amiguitos. Lo mismo ocurre en los bares. Alguien que se te acerca en un bar y no sabe nada de más que la imagen que le está entrando por los ojos no parece una situación desesperada de búsqueda de amistades.
Hay muchas situaciones en las que dos personas pueden irse conociendo y crear una relación de amistad sin nada de atracción de por medio. Un ejemplo sería en el ámbito laboral. El pasar tantas horas con personas que hasta entonces no conocías te da una visión general de esa persona que puede llevarte a iniciar, así sin más, una amistad.
Me desilusiona a la vez que me hace sentir agradecida cuando alguien en el que habías puesto una ilusión de amistad ,y solo amistad, la pone en riesgo por la más pura sinceridad de sus reales sentimientos. Por supuesto, te hace sentir halagada, pero también representa para mí una guerra perdida. Tanta lucha para defender lo que el resto de gente intentaban hacerte ver cuando al final ellos podían tener razón. Cuando este momento llega, no puedo evitar ponerme furiosa conmigo misma por no haberlo querido ver antes.
No es inocencia real. Muy pocas veces no se nos pasa por la cabeza que la persona con la que hablamos, que acabamos de conocer y nos presta tanta atención, busca un futuro más allá. La mayoría de las veces hemos reflexionado sobre ello y lo hemos desechado porque de verdad queríamos ser amigos de esa persona.
Ahora que lo veo desde fuera consigo entender la postura de tanta gente intentando hacerme ver cosas que yo me negaba a aceptar. Ahora sólo queda ser más realista y pensar mal de vez en cuando para evitar situaciones incómodas y para evitar hacer daño a terceros. Ellos suelen ser siempre los grandes perjudicados.

21.2.09

Momentos de lucidez...

Me he dado cuenta de lo triste que es que sólo tengamos unos pequeños momentos de lucidez. Me da pena que nuestra memoria sea tan corta y que una reflexión se nos olvide a los pocos días.
Os animo a que penséis cuántas veces un consejo, una moraleja, una reflexión de otra persona, un momento en una película, unas palabras en una canción, un caso conocido...os han hecho pararos a pensar en mil cosas. Tanto en lo que hay que valorar realmente en la vida, en lo importante que es tener a la gente que quieres y que te quiere cerca, al valor del esfuerzo personal, a lo dañino que es nuestro mundo egoísta...a tantísimas cosas que una vez reflexionadas nos decimos a nosotros mismos: "Esto se puede cambiar. Ahora me doy cuenta y tengo que seguir esta filosofía de vida". Es bonito llegar a ese momento en el que te propones emprender nuevas formas de desarrollar tu vida. La pena que me da es que tristemente y rápidamente se nos olvida.
Hoy, cuando terminaba de ver una peli tenía esa misma sensación. Ese momento de lucidez en el que te paras a pensar qué objetivos tienes en la vida, quién eres, quién está contigo apoyándote o qué estás haciendo bien y mal.
Ojalá pudiéramos poner en práctica y que se mantuvieran siempre en tu mente todas esas iniciativas que queremos aplicarnos en nuestros momentos de lucidez, cuando crees que has encontrado de nuevo una revelación. Ojalá cuando nos damos cuenta de que estamos hundidos en el mundo capitalista y de consumo, cambiáramos más de dos días nuestra conducta. Ojalá que cuando decimos "tenemos que vernos más" no lo dejásemos en un hueco en nuestra mente al que no le damos mucha prioridad. Ojalá cuando sentimos que hay que valorar más todo lo que tenemos lo recordáramos en momentos de crisis, tristeza y presión.
No hay muchos que representen la excepción, pero seguro que alguno habrá. Seguro que hay alguna carita sonriente que sigue los principios que siempre considera correctos y es completamente feliz día sí y día también. Una carita amarilla entre el resto de caritas azules.

17.2.09

Elegida una canción...


Ayer, por primera vez después de casi 8 meses, Peter Pan y yo nos dimos cuenta de una cosa: no teníamos ninguna canción que reconociéramos como nuestra y para nosotros. Parece extraño ¿no? ¿No es una ley impuesta en las relaciones amorosas contar con una canción? Siempre pensé que las canciones de pareja se elegían porque era la canción que sonaba el primer día que se conocieron, o una canción que sonaba en un momento especial. Yo soy demasiado despistada para recordar qué canción sonaba en el bar de Tribunal en el que nos encontramos. Bastante tenía yo con intentar expresarme en inglés.

Cuando sentada en el avión, devuelta a mi normal life, se lo decía entre una conversación en la que los sueños y la imaginación dibujaban imágenes futuras, él también se sorprendía. Hasta ahora no se nos había ocurrido si quiera pensarlo.
Con esa duda en la cabeza sobre si teníamos o no teníamos canción, de repente, surgió la canción en nuestras mentes. Uno comenzó la frase y la otra supo exactamente de lo que hablaba. Era una canción que yo no había oído nunca hasta que le conocí. A partir de entonces, durante dos meses de verano antes de partir a Bruselas, sonaba siempre en su habitación. Una canción que nos recuerda esos primeros comienzos. No uno sino cientos de momentos de dos personas que se están conociendo y que flota sobre el aire en la mente de los dos lo complicada de la situación. Esas conversaciones volando entre la música en las que se quiere y no se quiere hablar, en las que el miedo ha dejar salir ciertas palabras te aprietan las cuerdas vocales.
Finalmente, hemos conseguido nuestra canción. No la hemos encontrado, siempre estuvo ahí, sólo que no nos habíamos dado cuenta antes.

Ahora sí volvemos a la vida real..

Se me hace raro no comenzar por mi "queridos todos" que tan cerquita me hacía sentir de vosotros. Bruselas se terminó entre un sentimiento extraño de felicidad y tristeza absoluta. Sin embargo, cuando estaba entrando en el proceso depresivo post-Erasmus llegaba mi viaje a Milán, así que, lo cierto es que no me ha dado mucho tiempo para caer en un oscuro agujero.

Acabo de volver hace unas horas de un maravilloso lugar llamado Milano. Digo maravilloso teniendo en cuenta que hablo de la provincia de Milano y no de la ciudad. Importante tenerlo en cuenta porque como estaréis pensando muchos de los que hayáis estado, Milán no tiene mucho si comparamos con otras ciudades italianas. Eso sí, permitidme dejar claro que el Duomo es una maravilla mundial a lo grande. Será por su forma tan diferente, será por sus dimensiones enormes, será por lo limpia y cuidada que está (que ya querrían muchas otras catedrales estar así de blanquitas)...No sé la razón pero a mí me impresionó como ninguna catedral lo hacía desde hacía mucho tiempo. En concreto, desde que estuve en frente por primera vez hace muchos años en Notre Dame en París.

Pero la provincia de Milán tiene mucho que enseñar. En mi recorrido por el mundo de mi italiano favorito he podido descubrir qué y dónde está Monza (a algunos les sonará por el Circuito de Fórmula Uno), Como y Livigno (en los comienzos de los Alpes italianos). Si me quedo con algo de todo lo visto es con esto último: Livigno y sus montañas completamente nevadas, el frío que te hiela la cara, las pistas de sky, la madera en todas las casas, las carreteras pequeñitas y congeladas, esos increíbles paisajes...







Me lo he pasado tan tan bien que se me ha olvidado todo. He perdido ese sentimiento de dura tristeza que hasta hace días me dejaba tan descolocada que no sabía situarme de nuevo en mi vida madrileña. Y es que todo ha salido a pedir de boca! Debéis entender lo importante de este viaje. Poneos en mi persona por un segundo: eliges para compartir tus momentos a una persona que no es de tu país por lo que ni conocer a sus amigos, ni conoces a su familia, ni conoces su entorno. Estas vacaciones eran precisamente para eso y llevaban esa precisa presión añadida. Pasar el "gran test" ante sus amigos, ante sus padres y ante su hermano. Eso acarrea unos primeros momentos de inseguridad y nerviosismo que gracias a Dios pasaron rápido por lo agradables que han sido todos conmigo. Será por ello que he estado tan agusto y tan contenta durante estos días. Me lo han puesto todo muy muy fácil.

He sacado muchas conclusiones y experiencias en estos días. Ha habido muchas conversaciones de las que una no deja de aprender cuando te dedicas a escuchar, ha habido un acercamiento al italiano que me hace ganas de ponerme con ello y aprender con todo la ilusión que traigo en este momento, ha habido un entendimiento de cómo es esa persona que está a mi lado conociendo sus raíces, y ha habido una evolución de unión sentimental grandiosa después de haber estado tantos días juntos a todas horas sin cansarnos el uno del otro.

Simplemente puedo decir que estoy muy feliz.

Hola a todos mis pequeños, he vuelto a casa.