Ahora toca la jardinería...

A mi querida madre, y me temo que no es la única la dan rachas de actividad. Será por aburrimiento o porque simplemente de vez en cuando hay que hacer cosas diferentes pero en esta época en la que le dan las rachas de actividad no sólo se ve afectada ella, en general toda la casa se ve revolucionada.

La última etapa en este fenómeno parece que ha sido la jardinería. No ha llegado el buen tiempo (que por cierto menudo asquito de primavera, que se estarán llenando los pantanos y tendremos suficiente agua pero por Dios que ya estamos casi en verano"!!) pero ha llegado el momento, según he podido ver, de renovar el jardín.

El otro día me levanto, bajo a la cocina, miro por la ventana y me encuentro el percal. Todo lleno de plantitas en sus macetas listas para ser trasplantadas y decorar nuestra zonita verde. Y sí, ahí estaba mi madre como una loca con los utensilios de jardinería que alguien nos regaló ( es de esos regalos que aparecen un día en el garaje y te preguntas de dónde habrá salido pero que es el momento de usarlo).

Eso sí, he de decir algo, mi madre es tan maja que compra flores y se acuerda de mí porque...¿qué me encuentro adornando la entrada de la casa? Y no, no miréis la foto, esas son otras florecitas que ya están perfectamente plantadas. Pues resulta que compró para mí MARGARITAS! No son las blanquitas, las clásicas que tanto adoro y que de momento siguen vivas en mi habitación, son púrpuras y blancas. Muy monas.

Bueno, el caso es que, como decía, esta sólo es una racha más de actividad. Hace poco llegó otra, la de limpieza general de armarios. Y esta sí que nos afecta directamente a mi hermana y a mí...aunque he de reconocer que ser la mayor y tener cierta edad tiene sus ventajas.

Un día cuando mi hermana llegó del cole se encontró bolsas y bolsas de basura con cosas que mi madre había decidido "no debían decorar la habitación de mi hermana". Así sin más. Yo tuve el privilegio de meter mano yo a la habitación y no encontrarme con las decisiones unilaterales de la señora de la casa.